Apartando el respeto a las víctimas que no son responsables de la tragedia… los muertos y desaparecidos de Tejerías merecen una reflexión que esclarezca lo sucedido… para evitar nuevas desgracias en el futuro.
Las cifras que al momento de escribir estas notas entrega la vice Delcy Rodríguez van camino de superar los muertos yanquis que produjo a su paso por La Florida un huracán Ian de grado 3 que en momentos llegó al máximo.
Por supuesto que nuestras cifras de fallecidos pueden superar por 50 veces los 2 muertos que en Cuba se contaron al paso del mismo huracán.
En el Caribe hay países muy pobres –es el caso de Cuba y otras islas- y también países con mayores recursos… incluso un estado asociado a la Unión Norteamericana que es Puerto Rico.
En todos esos territorios los equipos de defensa civil están más o menos preparados para este tipo de eventualidades que anualmente ocurren con el paso de los ciclones. Y en consecuencia hay planes para evacuar al ciudadano en riesgo… y actuar cuando los el viento y la lluvia amainan y dejan atrás los daños.
Desde que comenzó la descentralización en Venezuela sucesivos gobiernos han tomado la vía estadounidense de organizar las defensas civiles a 3 niveles: y las hay nacionales… regionales… y municipales.
Se supone que todas actúan coordinadamente pero igual esas defensas civiles son autónomas y todas podrían tener planes para actuar en caso de tragedias.
Bien: como ya escribí, la cifra de nuestros compatriotas fallecidos superan las del paso de uno de los peores huracanes por la Florida y aún mucho más las de Cuba… y uno tiene derecho a preguntarse ¿en qué se gastan los recursos que aún son grandes… de las defensas civiles?
La pregunta viene acompañada de una reflexión y varios razonamientos… porque de otra manera estaríamos cayendo en el inútil juego que ha consumido 20 años entre dimes y diretes de la polarización que todo lo estupidiza y de nada se responsabiliza.
Cualquier contratista que haya ofrecido equipos para las defensas civiles a las alcaldías… gobernaciones y entes nacionales… sabe que apartando coimas… es difícil la venta porque ese “lomito” la corrupción lo reserva para los allegados.
El punto es que en el caso que hoy nos atañe… la zona donde el río llega a Tejerías evidentemente constituía un peligro grave de inundación.
De hecho en el pasado ya habían ocurrido pequeñas tragedias… pero con ese recuento forense no basta.
Para el 23 de enero de 1958 y me perdonan los obtusos que piensan en esa fecha como parte del pleistoceno… no estando inaugurada la autopista el tráfico este-oeste pasaba por Tejerías y allí en lo alto había y hay… una gran plaza para estacionar… y una pequeña tienda donde vendían frutas, queso de mano y panelas de San Joaquín.
Esa área hoy no fue víctima de la inundación como lo fue la rivera del río que en tiempo de estío… es caudaloso y donde antaño no se permitía construir.
Fue la desidia urbana de los gobiernos puntofijistas y luego de los bolivarianos… la causa inicial de estas muertes que no habrían ocurrido si los sucesivos gobiernos… a todos los niveles… no hubiesen permitido el surgimiento de locales comerciales… casitas… campos deportivos y pistas de moto cross donde algún día iba a ocurrir una inmensa avenida… como la que acabó con al menos una treintena de muertos… y más de setenta desaparecidos… entre ellos niños.
El punto es que no pareciera que estos temas les importan a quienes solo tienen ocupadas sus dendritas… en las elecciones primarias… si son de oposición.
Y en adelantarlas presidenciales… si son directivos del gobierno.
Planes alternativos los hay… pero a ninguno de los cuarenta o más “presidenciables” de la oposición… o al gobierno y sus disidencias… se les escucha razonar a fines de resolver el problema de unas instituciones donde se encuentran voluntarios que en cada tragedia dejan el corazón… y directivos gordos… que más allá de ruedas de prensa idiotas… solo piensan en las comisiones que les pueden reportar las compras de nuevos equipos… o al menos de cobijas… si el presupuesto de un país cuya economía solo puede competir con la haitiana, la cubana o la hondureña… es lo que permite.
¡Se impone cortarle las cabuyas a estos burócratas ladrones… que en medio de la tragedia… descansan en hamaca!
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